La felicidad es un estado del
ánimo que supone un nivel específico de satisfacción. Quien está feliz se siente a
gusto, contento y complacido. El concepto de felicidad es subjetivo y relativo.
No existe un índice de felicidad o una categoría que sea necesaria alcanzar
para que considerarse feliz. Desde un punto de vista biológico, la felicidad es
el resultado de una actividad neural fluida, donde los factores internos y
externos estimulan el sistema límbico.
La Psicología Positiva ha venido revolucionando el concepto de felicidad y señala el camino
para conseguirla. El doctor Martin Seligman, hace una década quien desarrollo el concepto de "optimismo aprendido,"
considera como parte de las fortalezas humanas, aquellos aspectos que nos permiten aprender,
disfrutar, ser alegres, generosos, serenos, solidarios y optimistas.
Basándose en innovadoras
investigaciones, Seligman sostiene que la auténtica felicidad no solo es
posible, sino que -lejos de depender de la suerte y de los genes- puede
cultivarse identificando y utilizando muchas de las fortalezas y rasgos que ya
se poseen. Aplicando estas "fortalezas personales" en los ámbitos
cruciales de la vida, se pueden desarrollar protecciones naturales contra el infortunio,
la depresión y las emociones negativas, que ubicarán la vida en un plano nuevo y más positivo. Estos
conceptos son expuestos por el Doctor Seligman en su libro “la auténtica felicidad” en el cual
se proporcionan una serie de tests que permiten reconocer rasgos y fortalezas característicos. La lección
más trascendente de La auténtica felicidad estriba en que al identificar lo
mejor de nosotros mismo y desarrollar esos aspectos, podemos mejorar
sensiblemente nuestra vida y la de cuantos nos rodean.
No hay comentarios:
Publicar un comentario